Un buen día, charlando, Chris y yo nos dimos cuenta de que:
1. A mí siempre me ha hecho ilusión tener un huerto.
2. Chris sabe de huertos y quiere cultivar siempre que pueda.
Dado que sus huertos estaban en otra provincia muy lejos de nuestra casa, decidimos buscar algo en la zona de Piedrahita conscientes de que las fechas eran bastante apretadas y de que a lo mejor no llegabamos a tiempo.
Como de costumbre en mi vida, la cosa llegó en menos de una hora. Era martes, día de mercadillo en Piedrahita y los ganaderos pasaban por la clínica para pagar y otras cosas y el segundo ganadero al que le pregunté, no solo me dijo que tenía un huerto con agua, sino que además, me lo dejaba con tal de que lo tuviera limpio. Y..... se hizo el milagro. Ese día a la hora de comer, estábamos Chris y yo allí viendo la tierra preciosa que había descansado durante años y que estaba preparada para darnos verduritas y frutas ricas.
En muy pocos días, Chris había planeado como desbrozar todo el terreno que estaba lleno de zarzas: con las manos. Y como quemar los restos para poder empezar lo antes posible. Pedimos permiso y llegamos por los pelos, pero al final, funcionó.
Y al poco, estabamos construyendo "cold frames" y puertas inglesas para el huerto y empezando a planear las variedades.
Tras los cold frames, vinieron los tres apartados para el compost.
Decidimos que queríamos todo en ecológico. Desde el estiércol hasta las semillas. Afortunadamente, dos ganaderos de la comarca decidieron hace unos años trabajar en ecológico y recoger el estiércol de sus vacas y becerros fué trabajoso, pero en el fondo, sencillo. Las semillas llegaron por correo desde España, Inglaterra y Francia y me dí cuenta de que todo lo que hay que hacer es pensar y correr riesgos. Y VALE LA PENA.
Un beso Pedro. Y gracias por tu ayuda. Pedro y su padre, Antonio nos enseñaron la revista que encabeza la biblioteca y nos descubrieron en una charla en su casa no solo los rincones del ecológico en España, sino un chorizo impresionante que todavía se hace en la comarca, para mas detalles, en su casa. ¡que rico y que buena compañía!
Bruno no se perdió detalle, estuvo con nosotros hasta transportando el estiércol en las bolsas que veis de pienso.... ecológico, por supuesto.
Bueno, mañana mas. De aquí a los tomates de la foto, queda mucho que contar.
Un beso.
And in that huerto I fell in love and love and love and love...with you and the valley
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